En INFOUNSA, no podemos estar ajenos a lo que pasa a nuestro alrededor y menos si es un tema que nos afecta a todos en mayor o menor medida. Sabemos que, en menos de un año, distintas industrias farmacéuticas han desarrollado o aún se encuentran trabajando en vacunas para la COVID-19, por lo que, a manera de resumen, te mencionaremos aquellas con mayor distribución y que están autorizadas en el mundo.
(Haz clic en las imágenes para poder visualizarlas mejor.)
Pfizer/BioNTech
La farmacéutica estadounidense Pfizer junto con la empresa alemana de biotecnología BioNTech trabajaron para crear esta nueva vacuna que a diferencia de las tradicionales que se elaboran a partir de virus inactivos y aislados, la vacuna Pfizer utiliza la tecnología a partir del ARN mensajero o abreviado, ARNm.
La eficacia de la vacuna es de un 95% y debe ser aplicada dos dosis de esta, con 21 días de diferencia y actualmente es la vacuna con mayor aplicación en distintos países del mundo, mencionando como un ejemplo a Israel, el cual ya ha alcanzado que la mitad de su población sea vacunada permitiéndole ser el primer país en regresar a la normalidad que existía antes de la pandemia
El funcionamiento de esta vacuna consiste en utilizar el ARNm, código genético para que nuestras células puedan producir una proteína en particular llamada “proteína Spike”, la cual está presente en la superficie del virus que produce el COVID-19. El ARNm se encuentra envuelto en burbujas aceitosas de lípidos con el fin de protegerlo debido a que es muy frágil expuesto a temperatura ambiente y puede ser destruido, es por ello que se necesita mantener esta vacuna a muy bajas temperaturas de 70 grados Celsius bajo cero, por lo que tiene un alto coste de almacenar y transportar.
Moderna
La vacuna mRNA-1273 o Moderna fue creada por la empresa biotecnológica con sede en Cambridge, Massachusetts y frente a la vacuna que te mencionamos anteriormente, es muy parecida a esta ya que cuenta con una eficacia del 94.1% y debe ser administradas dos dosis, a su vez también utiliza la misma tecnología del ARNm, sin embargo, hay una gran diferencia resaltante entre estas.
AstraZeneca
El grupo AstraZeneca junto con la universidad de Oxford crearon esta vacuna a partir de un adenovirus que causa el resfriado común en los chimpancés, modificado genéticamente el virus se encargará de llevar el gen de la proteína Spike. Administrada la vacuna, el gen proporcionará a las células de producir mas proteínas para que a consecuencia de ello se generen anticuerpos.
Sinopharm y Sinovac
El grupo Sinopharm se encuentra trabajando en dos vacunas en fase III de prueba, la primera de ellas se desarrolla con el Instituto de Productos Bilógicos de Pekín, mientras que la segunda vacuna está a cargo del Instituto de Productos Biológicos de Wuhan. Ambas vacunas consisten en que el Virus SARS-CoV-2 sea inactivado con sustancias químicas, y alterado genéticamente para no reproducirse por lo que pierde su capacidad de causar infección, pero puede estimular la producción de anticuerpos que neutralizan al virus.
La vacuna que ya se encuentra en nuestro país es la Sinopharm de Beijing, con una eficacia de 79.34% aprobada por la Administración Nacional de Productos Médicos de China, entidad reguladora de dicho país.
Sputnik V
Vacuna desarrollada por el Centro de Investigación de Epidemiología y Microbiología Gamaleya de Moscú (Rusia) alcanza una eficacia del 91,4%.
Como ya hemos mencionado, el virus SARS-CoV-2 está cubierto en su superficie de proteínas Spike o simplemente proteínas espiga que son las que permiten penetrar en las células humanas, por lo que la tecnología utilizada por la vacuna Sputnik consiste en brindar instrucciones genéticas para armar estas proteínas dentro de las células, sin embargo, a diferencia de Pfizer y Moderna, las cuales almacenan estas instrucciones en el ARNm, la vacuna rusa utiliza el ADN bicatenario y gracias a esa diferencia es que Sputnik es más resistente y no requiere ser almacenada a muy bajas temperaturas.
En general ,se ha comprobado que, aunque hay cierta heterogeneidad en la respuesta según cada individuo, en la mayoría de las personas en las que se ha analizado mantienen una robusta respuesta inmune humoral (anticuerpos) y celular (linfocitos T), de como mínimo entre 6 y 8 meses después de la infección, independientemente de que sean leves o graves.
El efecto que puedan tener las nuevas variantes genéticas del SARS-CoV-2 en la vacunación y en el transcurso de la pandemia es una incertidumbre. La buena noticia es que hoy la comunidad científica tiene la capacidad de seguir la evolución a tiempo real del virus y la aparición de nuevas variantes genéticas.
Hay ya más de 260 000 secuencias del genoma de SARS-CoV-2 disponibles en las bases de datos.
Y para finalizar, debemos mencionar que la comunidad científica desconoce cómo será una posible cuarta ola, ni el efecto que puedan tener las nuevas variantes genéticas que van apareciendo, pero la buena noticia es que a nivel global la pandemia en este momento decrece.
Buenos dias me gustaria saber quiene son los autores de este articulo, asi mismo necesito saber el DOI, que no lo encuentro aun , agradezco su apoyo de antemano.
Buen dia.
haga clic en la seccion «fuentes»
allí aparecen todos los enlaces de donde se tomó esta información.
si tiene o no DOI, ya podrá revisarlo en cada uno