Los activos no fungibles -que no se consumen o usan y que no tienen sustitución- atrajeron la atención de miles de inversionistas, luego de que las casas de subastas como Christie’s y Sotheby’s lanzaron sus respectivas pujas por los certificados de propiedad de activos de arte digitales.
En el caso de Christie’s, la subasta del token digital de la obra “Everydays: The First 500 Days” del artista estadounidense, Mike Winkleman, conocido como Beeple alcanzó los 69 millones de dólares. Poco después su rival Sotheby’s subastó miles de tokens no fungibles (NFTs) de cubos creados por el artista digital (se desconoce si es una persona o un grupo de artistas) conocido bajo el pseudónimo Pak. La histórica subasta de tres días sumó 16.8 millones de dólares, según informó la misma casa de subastas.
¿Qué es un NFT?
Los NFT son tokens que son equivalentes a certificados digitales de autenticidad y que son verificados a través de blockchain, que es el libro de contabilidad descentralizado que registra estos activos únicos, y así pueden venderse en el mundo digital.
Estos tokens no sólo se mueven en el mundo artístico. El mercado es tan amplio que incluye nombres, columnas digitales de periódicos, edificios virtuales, avatares y hasta tuits. En este espacio virtual, conocido como metaverso, se mueven millones de dólares.
En este año, los NFT parecen estar por doquier, hasta empresarios entraron al mercado. Jack Dorsey, cofundador de Twitter, subastó el token de su primer tuit. El resultado: 2.9 millones de dólares para Dorsey, quien dijo haber donado el dinero en bitcoins.